El australiano Caleb Ewan (Lotto Soudal) se ha impuesto en la cuarta etapa del Tour de los Emiratos disputada entre Dubai Palm Jumeirah y Hatta Dam, de 197 kilómetros, en la que el esloveno Primoz Roglic (Jumho) mantuvo el jersey amarillo y Alejandro Valverde, cortado por una caída, cedió 3 segundos con el líder.

Premio para un esprinter en Hatta, en un muro de temblar, donde no obstante los velocistas más potentes han sabido ganar, como el español Juanjo Lobato en 2015. Ewan atacó en la agonía final e hizo inútiles los intentos del Emirates por Kristoff. El "aussi" levantó los brazos con un tiempo de 4h.27.07.

Le siguió al final de la rampa el italiano Matteo Moschetti (Trek) y el líder, Primoz Roglic, a 2 segundos, sorprendido en los metros finales por los hombres rápidos del pelotón. Alejandro Valverde perdió gran parte de sus opciones a 6 kilómetros de meta, cuando una caída le cortó la marcha y se vio obligado a perseguir. Ese esfuerzo lo pagó a la hora de la verdad y el campeón del Mundo llegó octavo, a 3 segundos del líder.

En la general nada decidido, pendiente de la cita del viernes en la etapa con final en alto en Jebel Jais. Roglic tuvo el santo de cara y con los segundos de bonificación aventaja a Valverde en 21 segundos y en 38 al joven francés David Gaudu (Groupama)

Una etapa movida, con viento, cortes importantes y caídas. En una de ellas se marchó al hospital la joya belga Remco Evenepoel (Deceunick) con un fuerte golpe en las costillas, pero por suerte el doble campeón mundial júnior no tuvo fractura alguna.

No faltó la fuga del día, esta vez con Boev y Nych (Gazprom-Rusvelo), Clarke (Trek-Segafredo), De Marchi (CCC) y Planet (Novo Nordisk).

Mientras el quinteto disfrutaba de la aventura, el viento provocó algunos abanicos que terminaron en cortes que afectaron a algunos favoritos. El pelotón se partió en dos, con Valverde, Roglic y Dumoulin delante y Dan Martin rezagado.

Movistar aceleró para eliminar a un posible rival, pero el Jumbo del líder no estaba por la labor de echar una mano, lo que provocó el enfado de Valverde. Finalmente los dos grupos se juntaron y todos juntos iniciaron la operación captura.

Las intenciones del Movistar eran evidentes asumiendo el ritmo en buena parte de la etapa. La fuga tiró la toalla a 10 kilómetros de meta a pesar de la rebeldía de De Marchi. Entonces llegó la desgracia para el maillot arcoíris, quien a punto estuvo de echar pie a tierra por una caída.

La maniobra le obligó a perder unos segundos preciosos cuando la carrera iba lanzada, Valverde quedó en un tercer grupo perseguidor, Dumoulin tiraba por delante. Un esfuerzo extra puso al murciano en condiciones de disputar una etapa que tenía marcada, con un final similar al Muro de Huy, donde el Bala ha ganado "sólo" 5 veces.

Una rampa explosiva de 200 metros al 17 por ciento hasta el puente de la presa de Hatta iba a designar al vencedor, allá donde el paisaje se presenta de súbito en una precisa mezcla de agua y montañas. Atacó el Emirates para Kristoff, el Sky colocó a Kwiatkowski, Roglic buscaba el hueco para rematar, y Valverde se había quedado sin chispa.

Apareció Caleb Ewan, todo un esprinter de la escuela australiana para aguantar el esfuerzo agónico de la imposible pared de Hatta. Y se llevó una etapa que avala las opciones de los velocistas en este tipo de llegadas.

Este jueves se disputa la quinta etapa entre Sharjah-Flag Island y Khor Fakkan, de 181 kilómetros.

EFE